¡Mi primer libro!

¡Finalmente!

Estoy muy emocionada porque es algo que nunca había hecho y se siente bien bonito verlo ya disponible.

Esto ha sido una de las tantas aventuras de “salirme de la zona de confort”. Algunos se habían preguntado que qué había pasado con esa etapa  y la realidad es que no fue que lo he dejado; simplemente las aventuras han cambiado.

Ya no se trata de bailar o cosas así… ahora se trata de cosas que tienen que ver con trabajo y proyectos personales que he preferido mantener en privado porque siempre he pensado que no todo debe hacerse público.

La cosa es que decidí tomar esta experiencia que nació casi en 2020, cuando mi psicóloga me sugirió escribir un libro porque consideraba que muchas de mis reflexiones podrían ayudar a las personas. Y pues de ahí surge este newsletter, para hablar de cosas no relacionadas con nutrición.

Debo admitir que me tardé demasiado y por eso decidí no darle más largas, tomarlo como OTRA EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE más y tirarme al agua valiente con #loquehay en lugar de LO QUE SE SUPONE QUE TENÍA QUE HACER, porque justo esto último es lo que me estaba deteniendo.

Y aquí les pongo algunos ejemplos:

-Lo que se supone: Que la portada debía ser un chuzo, ojalá de diseñador

-Lo que hice: La hice yo misma una tarde pensando que quien la viera, pensara que se iba a tomar un café conmigo.

-Lo que “debía hacer”: mandarlo a un filólogo y pasarlo por 20 revisiones

-Lo que hice: cambié algunas frases y lo pasé por el corrector de word

El resultado: ¡10 versiones en menos de 2 horas! Pero al menos ya sé qué se supone debe llevar el manuscrito para poderlo publicar, así me va a ser más fácil cuando contrate a otros para hacerlo.

Esto solo me estaba deteniendo y abrumando (pensar que no lo tenía perfecto y en lo que tenía que hacer)

¿Y no te da miedo que quede “poco profesional”? – me podrían preguntar más de uno.

Absolutamente NO.

Tengo CERO expectativas de esto, lo hice por mí… como un ejercicio para VER QUÉ SE SIENTE, QUÉ PASARÍA y experimentar si esto es algo que me llena lo suficiente para seguirlo haciendo. 

Al final, SIEMPRE puedo cambiarle la portada y SIEMPRE voy a poder sacar una segunda, tercera o cuarta edición.

Me tomó una hora recopilar las reflexiones.

Unos minutos hacer la portada

Una tarde formateando

Y como 7 MESES procastinando porque NO TENÍA LAS “COSAS LISTAS Y PERFECTAS”

¿Ven todo el tiempo que desperdiciamos cuando esperamos “el mejor momento”, o “las cosas perfectas” o “las cosas bien hechas”?

Como dice el dicho: ” Es más fácil y tiene más sentido darle dirección a un carro cuando SE MUEVE, y no cuando está estacionado”

Un fuerte abrazo,

The Pancake Chick®

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *